Bolivia apuesta por
una economía que sirva a la Madre Tierra (Arce)
Derechos de la Madre Tierra |
La Paz, 22 abr (ABI).- El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Luis Arce, aseveró el
lunes durante el diálogo interactivo sobre "Armonía con la
Naturaleza" que se desarrolló en la Organización de las Naciones Unidas
(ONU) que Bolivia apuesta por una economía que sirva a la Madre Tierra y no que
se sirva de ella.
Ese diálogo en el
organismo internacional fue convocado por el país a propósito del Día
Internacional de la Madre Tierra que se celebra este 22 de abril.
"Pese a los
momentos complicados que estamos atravesando, puesto que no es nada fácil
garantizar el vivir bien de nuestras sociedades, el Estado Plurinacional de
Bolivia apuesta por una economía que sirva a la Madre Tierra y no por la
continuación de los actuales modelos que conlleva a que la economía se sirva de
la Madre Tierra y de los seres humanos como simples e ignorantes
consumidores", mencionó.
Este año, el diálogo
interactivo ha determinado tratar los diferentes enfoques económicos en el
contexto del desarrollo sostenible, que promueve una base más ética para la
relación entre los seres humanos y la Madre Tierra.
En ese contexto
desde 1972, dijo Arce, que en el marco de las Naciones Unidas, los países se
organizaron y resolvieron, "sobre todo en papel", la inminente
necesidad de entender que la economía no puede ni debe estar por encima de los
seres humanos y menos de los recursos naturales, es decir, no continuar con ese
enfoque superficial de la economía que separa al ser humano de la naturaleza y
lo coloca fuera y por encima de la misma, presuponiendo que las cosas sólo
tienen sentido cuando le son útiles a él.
Así también, recordó
que en 1992 los países del mundo se reunieron y comprometieron de buena
voluntad al ejercicio del derecho al desarrollo, en forma tal que responda equitativamente
a las distintas necesidades de las generaciones presentes y futuras.
Y, a fin de alcanzar
el desarrollo sostenible, la protección del medio ambiente debía constituir
parte integrante del proceso de desarrollo y no considerarse en forma aislada.
El Ministro de
Economía, en su ponencia resaltó que en lugar de honrar esos principios y
obligaciones, el sistema capitalista "nos quiere vender un modelo
sustentado en la economía verde, que nos indica que el error de la humanidad
fue no poner precio a los recursos naturales, no poner precio a la Madre
Tierra".
Información oficial
de las Naciones Unidas indica que en los próximos veinte años, el mundo
necesitará al menos un 50% más de alimentos, un 45% más de energía, un 30% más
de agua y muchos millones de nuevos empleos. Ante esta lamentable realidad, se
requieren adoptar enfoques holísticos e integrados en relación con estas
dificultades que no están aisladas, por el contrario están entrelazadas.
También hay
conciencia de la existencia de 840 millones de hambrientos y 1.300 millones de
pobres, 900 millones de personas que no acceden al agua, 2.600 millones de
personas que no acceden al saneamiento y más de 200 millones de desempleados
agravados por la crisis financiera nos lo dicen con una realidad descarnada.
Arce señaló que
Bolivia nunca quedará satisfecha mientras que el consumismo y la depredación
irracional de los recursos naturales sean los factores que continúan el saqueo
a la Madre Tierra.
Mientras, agregó,
que el crecimiento económico tenga lugar a expensas de los recursos naturales y
de los ecosistemas, provocando desbalances que nos están llevando ha ya no
contar con el recurso vital del agua, con la biodiversidad, con suficientes
alimentos, con ecosistemas y sobre todo con oportunidades de una vida digna.
"No mientras
continuemos siendo testigos de cómo los países desarrollados desperdician 220
millones de toneladas de alimentos anuales, que equivalen a la producción anual
de alimentos de África Subsahariana en un año, o que 40% de los alimentos se desperdicien
en la cadena de consumo".
Finalmente mencionó
que la lucha persistirá mientras se tengan índices que 770 millones de personas
continúan sin acceso al agua potable, o cuando nos dicen que mil millones de
personas vivirán en la pobreza extrema en 2015 en todo el Planeta, o cuando
observamos que continua la destrucción masiva de la biodiversidad, de nuestro
sistema climático por la emisiones de gases de efecto invernadero.